De burros y pensiones rascas

Agosto vino con frío. Las calles de Buenos Aires son largos canales grises hundidos entre acantilados de espanto. Arrebujados en sobretodos y bufandas, hundida la cabeza, la frente angulada para cortar el viento ululante que llega desde el río abierto, los peatones son empecinados remolcadores a vapor. Peces gigantes y absortos, los autos y los bondis. Que pasan echando putas, como si pudiera alguien salvarse del invierno. Por las paredes anda la huella de combates que no cesan: Luche y vuelve, escriben unos, perseguidos y emboscados, y ni falta hace aclarar quién vuelve; Cada obrero un combatiente, escriben otros, perseguidos y emboscados también. FAR, FAP, Montoneros, PRT-ERP son las firmas. La sangre derramada no será negociada, escriben, y firman, todos esos. Porque es agosto de 1972, y en 1972 agosto vino con sangre. Gobierna de facto el general Lanusse, un miembro de la oligarquía vacuna, gobierna con mano de hierro pero así y todo vendrán tiempos peores. A pesar de la censura, del miedo, de la autocensura, no hay diario, periódico o revista, en ese final de agosto, que no traiga referencia al asesinato de guerrilleros desarmados que se habían rendido tras el fracaso parcial de su fuga. En el sur, allá en Trelew, palabra que desde el 22 de ese agosto frío suena distinta, candente, en denuncias, proclamas, pintadas, consignas, poemas, canciones. Y cerca de esa palabra repetida, en los kioscos, un librito alargado, de tapa en la que predomina el rojo, con un muñeco de mueca blanca asomado entre una pila de tallarines: El fideo más largo del mundo. Pertenece a la colección Narradores de hoy, del Centro Editor de América Latina, esa gran aventura cultural piloteada por el editor Boris Spivakov. Su autor es Bernardo Jobson, de cuarenta y cuatro o cuarenta y dos años. Como en tantas cosas de su vida, no hay certeza respecto de la fecha de su nacimiento: 1928 o 1930; eso sí, en Vera, provincia de Santa Fe. Jobson sólo ha publicado relatos sueltos en revistas; El fideo más largo del mundo es su primer libro, ya se está vendiendo muy bien. Se llegarán a agotar varias ediciones. Será uno de los libros más vendidos de esa colección que incluye a Andrés Rivera, Haroldo Conti, Graciliano Ramos, Ring Lardner, Germán Rozenmacher, Erskine Caldwell, Pablo Armando Fernández, Isidoro Blaisten, William Burroughs, Saki, Guillaume Apollinaire, Alphonse Allais, Daniel Moyano, Augusto Roa Bastos. En todos los kioscos, a razón de uno cada quince días. A precios económicos: de 3,50 a 4,50 pesos ley 18.188. Todas las traducciones son hechas en Argentina. El fideo más largo del mundo será el único libro que Jobson llegue a publicar, pero no lo sabe en ese agosto.

(La nota completa en la edición gráfica de Sudestada Nº 111 - agosto 2012)