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Tierra adentro

Vientos de soja

El avance de un modelo cada día más dependiente del recurso agropecuario, sobre la base de transgénicos y agrotóxicos, no encuentra límites. En Neuquén proyectan sembrar 15.000 hectáreas. Críticas de medianos productores y de campesinos. El imperio de Monsanto, los números de los pooles de siembra, gobiernos que recaudan y profundizan un modelo donde lo único que importa es aprovechar el momento.

Meseta patagónica. Jarillas, variedad de arbustos y una extensa superficie de tierra, irregular, con bardas incluidas. Y viento. Mucho viento que levanta remolinos de tierra y recuerda que se está en Neuquén, a 40 kilómetros de la capital, provincia sinónimo de Pueblo Mapuche, petróleo y -según promesas empresarias y de gobierno- el paisaje mutará a productivos campos de maíz, sorgo y soja. Impulsado por empresarios de Buenos Aires que prometen trabajo, desarrollo y cuidado del ambiente. Dudas de medianos productores, descreimiento de campesinos y un modelo agropecuario que avanza.

Sociedad Anónima
"Patagonia sustentable" es el nombre de la sociedad anónima que promete desarrollar el proyecto agropecuario más ambicioso de la historia de Neuquén. 15.000 hectáreas, con una primera etapa de 8.500, con un moderno y costoso sistema de riego por pivot (sistema de cañeras con ruedas). Utilizan cuatro palabras para definir su actividad: agua, energía, tierra y conocimiento. Y explicitan la misión de la empresa: "Producción de alimentos y biocombustibles para Neuquén".
Diego Heinrich es el presidente de la compañía. Informa que son productores de Necochea y Tres Arroyos con "treinta años de experiencia" en siembra directa (sistema basado en transgénicos y agroquímicos). "Llegamos a nuestro techo de expansión en nuestras zonas y queremos desarrollarnos, por eso exploramos la patagonia norte. Buscamos en Río Negro, La Pampa y nos decidimos por Neuquén porque hay disponibilidad de tierra, agua, energía", explica...

(La nota completa en la edición gráfica de Sudestada)

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Autor

Darío Aranda