Su mirada clara, su imagen serena, su larga barba blanca. Parece un abuelito, de esos a los que les gusta contar historias. Esos abuelos que, con sólo escucharlos, nos permiten aprender de nuestro pasado. Paulo Freire, nuestro aventurero, fue un abuelo amoroso pero también es muchas cosas más.
Su mirada clara, su imagen serena, su larga barba blanca. Parece un abuelito, de esos a los que les gusta contar historias. Esos abuelos que, con sólo escucharlos, nos permiten aprender de nuestro pasado. Paulo Freire, nuestro aventurero, fue un abuelo amoroso pero también es muchas cosas más.
Por ejemplo, eligió ejercer el oficio más hermoso: educar. Vivió un montón de años, y en su larga vida le enseñó a miles de hombres y mujeres algo fundamental: a leer y a escribir, y además los ayudó a hacerlo a partir de su propia realidad. Además, fue maestro de maestros y, a partir de su humildad, nos mostró que en la vida siempre hay opciones y que un educador debe saber qué camino elegir. ¿Qué hay que enseñar? ¿Cómo? ¿A favor de quién?
Su ejemplo vive, sus palabras siguen caminando y su lucha es puro presente.
Por eso, te invitamos a conocer la vida de este gran aventurero.
Acá nomás, apenas des vuelta la página, empezamos el viaje...
Disponible en kioscos y librerías
Pedidos a sudestadarevista@yahoo.com.ar